A lo alto, observando el horizonte se encuentra, el Castillo de San Antonio de la Eminencia.
Al día siguiente de que piratas franceses atacaron la ciudad de Cumaná en el siglo XVII, el gobernador de la provincia ordenó la construcción de cuatro fortificaciones en puntos estratégicos de la costa, para así poder defenderse de futuros ataques. La más reconocida y mejor mantenida de estas construcciones en la actualidad es el Castillo de San Antonio de la Eminencia. Esta fortaleza edificada justamente en ese lugar, fue siempre la mejor forma de otear las embarcaciones que se aproximaban a tierra firme, que podían ser aliados que traían nuevos colonos o misioneros para la evangelización; o piratas perleros y esclavistas, entre los que se encontraban en un principio muchos desertores de la autoridad audiencial, quienes por la ambición y el pillaje se constituyeron en feroces depredadores de los indígenas, pues se conocía en ese tiempo a Cumaná como la "Costa de las Perlas", por la abundancia del nácar precioso extraído del fondo del mar por los nativos guaiqueríes de Cubagua, como cumanagotos y caribes de tierra firme. Una de las mayores atracciones turísticas de Cumaná, es sin duda alguna, el castillo que domina toda la ciudad y la entrada al golfo de Cariaco. Como curiosidad, podemos mencionar que hoy en día el castillo se encuentra bastante retirado del mar, lo que no es muy lógico, si se toma en cuenta que los castillos eran edificados principalmente para proteger la ciudad de embarcaciones enemigas. La explicación es que el mar se ha retirado, y lo que es hoy la parte nueva de la ciudad, en la época en que fue construido el castillo, era mar. La construcción se realizó entre 1659 y 1686 en el cerro Pan de Azúcar, una ubicación óptima que permite visualizar la ciudad de Cumaná, el golfo de Cariaco y la península de Araya. El castillo tiene paredes de dos metros de ancho, y fue construido en forma de una estrella de cuatro puntas, las cuales señalan a los distintos puntos cardinales. Su calabozo albergó a importantes figuras de la historia, como José Antonio Páez y José Tadeo Monagas. Además hoy, a casi 350 años de su construcción, se siguen encontrando pasadizos y túneles secretos que desembocan en distintas partes de la ciudad. El terremoto de 1929 azotó fuertemente al castillo de San Antonio de la Eminencia. Sin embargo, la gobernación del estado se ha encargado de restaurarlo devolviéndole su gloria original. Fue declarado Monumento Nacional en 1965. Es un destino que no debe faltar en la agenda de cualquier visitante de Cumaná. Hoy, nuestro Castillo San Antonio de la Eminencia , es uno de esos íconos arquitectónicos de ese siglo dieciséis, que nos dejó una cultura de inconmensurable valía, donde el turista que nos visita puede retrotraerse a una historia que nos marca a todos, como un símbolo de ascendencia originaria que perpetúa en el tiempo a la civilización que nos brindó la inmensa oportunidad de ser tan majestuosos, como la misma construcción que vela todos nuestros pasos de ayer, de hoy y de siempre.
1 comentario:
Hola Eva,
me estuve paseando por tu blog, esta muy lindo... mi post favorito ha sido este, por eso te dejo mi huella aqui... Me ha gustado por muchas cosas, por la calidad de las fotografias, por la manera como cuentas las historias... en fin, me hiciste sentir como si estuviera en Cumana.
Espero continues adelante con tu blog porque esta buenisimo!
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